martes, 2 de octubre de 2012

Tirajana asumirá la apertura turística del yacimiento y Necrópolis de Arteara


Tras las negociaciones llevadas a cabo por el alcalde Marco Aurelio Pérez con la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural del Cabildo, cuyo pleno  ha ratificado su cesión administrativa al Ayuntamiento


El Ayuntamiento de San Bartolomé de Tirajana será el responsable de gestionar la apertura del yacimiento aborigen de Arteara una vez que el pleno del Cabildo grancanario ha dado luz verde al convenio que permite la cesión de esta necrópolis, la más grande y una de las mejor conservadas de toda Canarias.

Este acuerdo de cesión, que ahora será ratificado por el pleno del Ayuntamiento este viernes, fue solicitado hace un año al consejero de Cultura y Patrimonio Histórico Cultural de la Corporación insular, Larry Álvarez, por el propio alcalde Marco Aurelio Pérez, preocupado por el escaso uso público del yacimiento y de su centro de interpretación, y consciente de la necesidad de poner este recurso patrimonial e histórico al entero servicio de la población y del turismo que visita el municipio.

El Cabildo es propietario de los terrenos donde se enclava este camposanto aborigen, mientras que el Ayuntamiento es el titular de las instalaciones que albergan su centro de interpretación. Una vez que el Consistorio asuma la gestión administrativa, cultural y económica del yacimiento deberá decidir si lo explota de forma directa o convoca finalmente un concurso público para su mantenimiento y apertura diaria con horarios fijos y reglados.

El alcalde Marco Aurelio Pérez afirma que “este yacimiento es un bien cultural demasiado importante tanto para la población local como para los numerosos turistas que recibe el municipio a lo largo del año, y no es posible que siga cerrado después de una década de inversiones para la adecuación de su centro de interpretación”.

“El nuevo modelo pondrá fin a los inconvenientes y permitirá su aprovechamiento como recurso cultural por el Ayuntamiento de San Bartolomé, mientras que el Cabildo podrá seguir investigando sobre la  necrópolis, en particular, sobre su datación”, declaró Larry Álvarez en la última visita que realizó al yacimiento junto al alcalde, a mediados del pasado agosto.

En aquella visita el consejero insular de Cultura y Patrimonio también afirmó que desde el Cabildo se seguirá invirtiendo en la mejora de los accesos y en la renovación, modernización y unificación de la señalética del yacimiento, porque “no nos vamos a desentender de este enclave estrella de nuestro patrimonio”, dijo, y destacó que su Consejería destinaría inicialmente unos 15.000 euros a sus excavaciones a cielo abierto para que sirvan de interés para los visitantes.

Bien de Interés Cultural

La Necrópolis de Arteara, declarada bien de Interés Cultural desde 1973, es uno de los yacimientos más importantes del Archipiélago debido a su especial configuración sobre el malpaís resultante de un derrumbe masivo de la ladera montañosa, y por su proximidad al cauce del barranco y a un extenso palmeral.

Pero este yacimiento es sobre todo importante por su magnitud, con una superficie de 137.530 m² y más de un millar de enterramientos tumulares individuales y colectivos, de los que por ahora se han podido datar, estudiar e inventariar unos 809, de los que cerca de un 40% han sido expoliados, según denunciaron sus técnicos conservacionistas, José de León y José Cuevas, que fechan este camposanto aborigen en 2.000 años de antigüedad.

Ambos inspectores de Patrimonio Histórico del Cabildo destacan que el enterramiento más antiguo de esta Necrópolis data del siglo V antes de Cristo, y el más reciente del siglo XVIII. “Se ha conservado gracias a la visión proteccionistas de los propios vecinos de Arteara, a quienes debemos también el conocimiento de su uso funerario arqueoastronómico”, dicen.

Arteara se encuentra también integrada dentro de la campaña integral para el mantenimiento de yacimientos arqueológicos y sitios etnográficos del Cabildo, junto a otros yacimientos del municipio como El Llanillo (BIC) y Punta Mujeres, donde recientemente también se renovó toda la señalética y se arregló y repintó el vallado, con una inversión de 20.600 euros.

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